Las manos constituyen el primer vector de transmisión de bacterias y virus, siendo responsables de la propagación del 80 % de las enfermedades infecciosas comunes, así como del 80 % de las enfermedades nosocomiales en hospitales. La Jornada Mundial de la Higiene de Manos anual es un recordatorio del papel principal que desempeña el lavado de manos a la hora de limitar la transmisión de bacterias y virus.
Las buenas prácticas de la higiene de manos, por tanto, deben estar totalmente asimiladas en las granjas, en las fábricas y en las unidades de preparación de comidas para garantizar que los alimentos, los consumidores y los compañeros de trabajo están seguros.
La prevención del riesgo de intoxicación alimentaria implica seguir estrictos protocolos de higiene de manos de limpieza y desinfección, realizando dichos protocolos a intervalos regulares para evitar la contaminación cruzado y después de cada actividad de riesgo (ir al baño, manipular un producto sucio) con los productos adecuados.
La gama de manos de Kersia ha sido diseñada para granjas, la industria alimentaria y el catering, así como los entornos sanitarios.
Nuestra gama de manos para la industria alimentaria y las unidades de preparación de comidas (unidades de cocina central y distribución masiva) consta de productos formulados para cumplir un objetivo triple:
- reducir el riesgo de contaminación;
- mantener la calidad de los alimentos;
- proteger las manos de los operadores.
Limpiar
Esencial para una buena higiene de manos
Desinfectar
Combatir los riesgos de la microbiología
Reparar
Combatir la dermatitis profesional
La gama abarca todas las necesidades específicas del sector y la aplicación e incluye: jabón hipoalérgico, jabón formulado para residuos lácteos y suciedad grasienta, un jabón de doble acción para lavar y desinfectar, un gel y líquido desinfectante hidroalcohólico, así como cremas nutritivas para las manos de los operadores que, a veces, están sometidas a condiciones duras.
El lavado y la desinfección de manos eficaz es un proceso metódico que se repite 5, 10 o hasta 20 veces al día en la industria alimentaria y el catering, e incluso con más frecuencia en entornos hospitalarios.